Saioa nos cuenta su experiencia en la G2-Haundiak:
Hola a todos.
Trataré en unas pocas líneas de resumir las sensaciones de esta fin de semana en la prueba g2-haundiak (88kims +6000 metros)
Era el campeonato de Euskadi de ultra trail y recorre la zona del Goierri pasando por los emblemáticos montes vascos Txíndoki y Alzkorri.
Es especial para mí ya que transcurre por zonas próximas a mi pueblo y por las que desde pequeña he realzado muchísimas excursiones y andadas con mi familia. Ha sido testigo de horas y horas de marchas y entreno s con mi pareja Álvaro.
Por esta misma zona trascurre la Ehumnnillak- 166kms +11000 metros (la herma mayor de g2) que completé en el año 2011.
No deja de sorprender el Goierri con su tiempo adverso incluso en verano. Esta primera noche con su niebla característica y un fuerte viento hacía que la sensación térmica fuera próxima a ios 5°C.
Tras la salida en Beasain a las 11h y tras unos primeros knris hasta Zaldibia, comenzamos la subida a Txindoki con frío, niebla y mucho aire, Tras coronarlo (sin esta vez alcanzar la cima), pasamos bordeando el Gamboa para descender al embalse de la zona Lizarrusti. Visión reducida a 60 metros por la niebla y e aire que te hace ir buscando las balizas una a una para no perderse y sufrir un accidente. Menos mal que el terreno no está muy húmedo.
Saliendo del avituallamiento de Lizarrusti hacia Etxegarate se hace de día y nos ofrece el precioso paisaje de bosque cerrado con multitud de colores. Una lástima que los tramos nocturnos de muchas de estas pruebas impidan observar a los corredores todo el esplendor de la naturaleza.
A partir de este punto (km 50), las fuerzas no me empiezan a acompañar sufriendo molestias en la cadera y en los sesamoideos. Tampoco Álvaro va mucho mejor ya que me informan que viene a unas 2h 30 por detrás. Decido poner un ritmo suave que me permita acabar sin arriesgar. La falta de entreno y de fuerzas pone a cada uno en su lugar, Lejos queda ya el año 2011 con los ultras de Sobrarbe, guara somontano, Madeira, Mont-Blanc y Ehummillak todos seguidos en pocos meses.
Llegamos a la subida de Aizkorri con algo de lluvia para llegar casi casi a mi casa (Urbia). Ya solo queda ir regulando subiendo Andraitz e iniciar el descenso para casi alcanzar la meta otra vez en Beasain.
En resumidas cuentas, carrera preciosa con un gran valor sentimental para nosotros y con unos paisajes increíbles. Prueba dura sobre todo, como era en mi caso, cuando las fuerzas están más que justas. Muy contenta por acabar y por ir recuperando poco a poco sensaciones